París, viernes 24 de abril de 2015 Con la fluidez en el desarrollo de la postura viene algo paradójico... vértigo, ansiedad, miedo, el impulso del apego... mil emociones, movimiento por todas partes, preguntas, "a veces no entiendo"... Contrario a cuando incié, quisiera quedarme en ella por mucho tiempo, recojida, postrada, con mis brazos agarrados, en esa quietud, diciéndome que hay que ser paciente, sintiendo la energía fluir, las lágrimas correr, el cuerpo adaptarse... Foto: Carolina Arantes © Pero no, la vida no es solo una postura, es bien real y ésta es solo una metáfora, un símbolo que me recuerda que debo ser paciente mientras el universo se armoniza para traerme lo que necesito... porque así será, no antes ni después sino cuando tenga que ser. Y entonces, en la relajación comienzo a decirme cosas hablando de tú a tú con Dios, el poder supremo, conmigo misma, no lo sé... le digo que ya es suficiente, que ya ofrecí mi sufrimiento y mi dolor, q...
Soy Carolina y tiemblo como mi postre favorito. Tengo la rara Enfermedad de Wilson. Aquí escribo mis memorias.